Berlín, Dic. 2013, por Claudio Steinmeyer
Reseña sobre el libro Nudos del análisis – Autora: Nieves Soria Dafunchio
/ Editorial Del Bucle, Buenos Aires, Argentina – 2013
Quiero aclarar rápidamente que no pretendo hacer un crítica técnica o
un resumen, al modo de cuando se escribe un prólogo a pedido del autor. Eso lo
ha hecho de manera excelente Claudio Godoy en la presentación del libro.
Trataré más bien de difundir a través de mi blog este nuevo trabajo de la
psicoanalista Nieves Soria Dafunchio (Bs. As. Argentina / miembro de la Escuela
de Orientación Lacaniana –EOL y de la Asociación Mundial de Psicoanálisis - AMP,).
Se trata entonces de un nuevo texto “Nudos del análisis” –el cuarto, que como
buen cuarto, actúa de lapsus del nudo y nos permite a la vez anudar de otra
manera los tres textos anteriores de la autora, a saber: Confines de las psicosis, Nudos de las
Neurosis y Nudos del Amor.
Quiero entonces ayudar a difundir la producción de esta creativa
psicoanalista. Y simplemente describiré algunas resonancias que mi sesgada
lectura ha causado el deseo de escribir estas líneas.
Clínica topológica. Reconozco que la expresión no aparece en el libro,
es una manera mía de designar una clínica en la que se procura dar cuenta en cada
caso, uno por uno, del particular anudamiento de los registros real, simbólico
e imaginario. Anudamiento que da cuenta del particular modo de fallar que el nudo
borromeo de tres (que no existe en la subjetividad como bien lo explica la
autora) presenta en cada uno.
Y es una clínica en la que se
destaca en primerísimo lugar el deseo del analista. Es en la construcción
topológica del caso, en la dirección de la cura orientada por esta topología,
en la que asistimos a una puesta en acto del deseo del analista dando cuenta
del verdadero núcleo de la clínica psicoanalítica de orientación lacaniana.
Un libro que finaliza muy cerca de dónde comienza, el sueño de la
Inyección de Irma y el Caso Dora respectivamente. Pero no en línea recta, no es
unir dos puntos de la producción freudiana es mas bien establecer el espacio de
una banda de Moebius en la cual superponer la enseñanza de Lacan. Se trata pues
de un libro con un sólido apoyo en Freud.
La autor nos invita a “navegar” el Aquerornte en una travesía donde recomienda
saber hacer nudos o bien aprender a hacerlos, en una sana alternativa en la que
se aprecia que de cualquier manera apuesta al deseo.
Además de la gran riqueza clínica que una vez más nos propone la
autora -característica presente en todos sus trabajos - a través de valiosos
ejemplos clínicos, encontramos algo que particularmente me gusta mucho,
seguramente por mi propio recorrido psicoanalítico: me refiero a la permanente
articulación entre Freud y Lacan. En esta época en la que hay una tendencia de
apreciar la obra de Freud como históricamente superada - por tratarse de una
clínica del Padre avasallada por la época- en Nudos
del análisis encontramos la misma rigurosidad epistémica con la que
Lacan operó los textos de Freud, partir de ellos para explicar sus logros e
impasses desde las coordenadas teóricas de la época actual. Es establecer
nuevos nudos. Pero además la autora realiza el mismo entramado de tejido y
destejido (brillante metáfora utilizada en el cap. IV) con la propia obra de Lacan, estableciendo
contrapuntos entre los Escritos y los Seminarios, ensamblando los distintos momentos de
la enseñanza de Lacan.
Sólo a modo de aperitivo situaría alguno de los cruciales temas trabajados
a lo largo del texto en los que la clínica actual interroga al psicoanalista: la
operatividad de la castración imaginaria (-phi) en relación al objeto, las
distinciones –siempre complejas tanto en Freud como en Lacan- entre Ideal del
Yo y Yo ideal, la delicada distinción entre acting out y pasaje al acto, las
vicisitudes de las operaciones de alienación y separación, el inconsciente real
y el inconsciente simbólico, la controvertida diferenciación entre paciente y
analizante, la cuestión de la contratransferencia, el por qué las mujeres
pueden ser las mejores analistas y también las peores, la correlación
(estupendo desarrollo !) entre las fórmulas de la sexuación y el anudamiento
borromeo, la situación de lo femenino en relación a lo simbólico, el analista
como ser-para-el-sexo, etc. Muy recomendable también el capítulo sobre el
„Contrapsicoanálisis“ en donde se interroga el valor del relato (en la
experiencia del testimonio durante el procedimiento del pase), cuestionando el
valor del relato lineal que se asemeja a la perspectiva cristiana que resulta
idealizante.
Y el común denominador a lo largo de todos estos temas: la tenaz
inclusión de la letra de la autora en
el propio texto, su estilo. El texto, a diferencia de la pintura, v.g. Las Meninas, requiere de una complejidad
mayor para encontrar al “pintor”, y creo que ésta es la gran enseñanza que nos
deja el texto de Nieves Soria Dafunchio, la decisión de hacer propios los
conceptos psicoanalíticos para dar cuenta del avatar transferencial en cada
caso y sus transformaciones subjetivas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario